Luego de nuestra visita a Cerro Azul, como ven en el mapa,
nos pasamos a los alrededores del distrito de San Vicente, Cañete; donde se
encuentra el Castillo Unanue.
Curiosa historia del lugar:
El encomendero español y liberal, Agustín de Landaburu y
Belzunce, le deja un terreno a José Hipólito Unanue y Pavón. Este lo divide
entre sus dos hijos; la actual hacienda San Juan de Arona para Francisca Unanue
y la Agrícola Cerro Blanco para José Unanue, quien es él que inicia la
construcción del castillo que dura alrededor de 60 años, y que terminará
llamándolo así en honor a su padre.
José Unanue construye este lugar con gran lujo, diseñado a su gusto; pues había visitado Europa y decidió comprar una construcción en Alemania para desmontarla y traerla a este lugar, por ello se hace notar un característico piso de mármol, lámparas gigantes, entre otros detalles ostentosos.
José Unanue construye este lugar con gran lujo, diseñado a su gusto; pues había visitado Europa y decidió comprar una construcción en Alemania para desmontarla y traerla a este lugar, por ello se hace notar un característico piso de mármol, lámparas gigantes, entre otros detalles ostentosos.
El castillo fue hecho con bases de adobe y paredes de
quincha que era común en la construcción de aquellos tiempos de 1843. Este
sitio lo han revestido con calicanto y debajo se pueden encontrar catacumbas.
Desde 1972, este castillo es conocido como un Monumento
Histórico Nacional, lastimosamente, debido al abandono de las autoridades, hoy
en día no lleva el cuidado más adecuado y se pude percibir su descoloramiento
interno, sin embargo, la fachada delantera, lleva un cuidado más o menos digno.
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